Concurso - Primero Premio

Zumárraga es el corazón que ha ido bombeando de vitalidad a La Antigua. Es su razón de ser y allí viven los que la aprecian y la conservan.
Zumárraga esconde un patrimonio tangible e intangible valioso, identitario, propio, que la diferencia de otros lugares.
Su territorio se percibe como un paisaje donde se puede leer la memoria histórica del pueblo.　
El centro de Interpretación y Acogida de visitantes de La Antigua se concibe como un espacio de encuentro, de refugio y de identidad para la población local y del visitante.
Su excepcional emplazamiento ha creado un serio compromiso con el diseño de un edificio de nueva planta, teniendo en cuenta que no suponga una irrupción en el paisaje ni cree competencia con la ermita de la Antigua.
Así, el Centro de Acogida de visitantes se adentra en el monte y sólo un 35% del edificio surge tímidamente al exterior, intentando pasar desapercibido y creando así un mínimo impacto visual, pero con el reclamo necesario para su función como equipamiento turístico.